Sobre mí y mi equipo

Soy Damian, y desde hace casi una década documento bodas de destino por toda Europa y más allá - siempre con una mirada tranquila, intuitiva y un profundo respeto por los momentos que realmente importan.

Junto a un pequeño equipo de videógrafos y una creadora de contenido en quien confío plenamente, solo acepto 15 bodas al año. Eso me permite ofrecer una experiencia totalmente personalizada: calmada, cercana y centrada en vosotros. Sin poses. Sin presión. Solo espacio para que viváis cada instante, mientras todo lo importante se captura con cuidado y elegancia.

Cuando te sientes realmente cómoda, es cuando ocurre la magia.
Y eso es exactamente lo que busco crear - estés donde estés.

Mi Equipo

Jowita

Dani

Videógrafo

Fotógrafa

Dani tiene un ojo cinematográfico y una precisión silenciosa que transforma cada boda en una historia visual con alma. Sus imágenes combinan emoción, ritmo y una mirada que sabe encontrar la belleza sin necesidad de artificios. Amante del detalle (y un poco friki de la tecnología), siempre está explorando nuevas formas de elevar lo que captura - desde la calma antes de la ceremonia hasta el desenfreno de la fiesta. Con él, nada parece forzado… todo se siente auténtico y elegante.

Jowita tiene la sensibilidad de quien sabe observar de verdad. Captura esos gestos fugaces, las miradas suaves, los pequeños momentos que construyen una historia de amor real. Su estilo es documental, intuitivo y profundamente natural. Inspirada por la estética vintage y los tonos nostálgicos, sus fotos tienen ese aire atemporal que emociona sin necesidad de artificios. Sus imágenes no solo se ven bonitas, se sienten como recuerdos.

Rose

Tim

Fotógrafa

Videógrafo

Tim tiene un don: estar siempre donde ocurren las cosas, sin hacerse notar. Sus vídeos transmiten emoción real, sin guiones ni poses, con una sensibilidad que los convierte en algo cálido y duradero. Cada plano está lleno de verdad, capturando el alma del momento con una delicadeza única. Si hay algo que define su trabajo, es la autenticidad.

Rose es una mezcla entre luz vibrante y alma libre. Su mirada es artística y atrevida, siempre buscando ángulos que escapan de lo típico. Tiene ese talento especial para hacer que cualquiera se sienta natural delante de la cámara, incluso los que dicen odiarla. Su amor por los viajes y las historias humanas da profundidad a cada imagen, creando fotografías que no solo capturan lo que se ve, sino también lo que se siente.